FEGATRAMER CONSIDERA EL PARÓN DE STELLANTIS Y DE LAS AUXILIARES DE LA AUTOMOCIÓN UN NUEVO GOLPE A LOS TRANSPORTISTAS GALLEGOS
El servicio de transporte de mercancías por carretera, el gran olvidado, solo está entre las preocupaciones de la sociedad, de nuestros dirigentes, “ cuando no se presta el servicio ”, en otro caso, parece invisible, nadie tiene presentes a los miles de personas que cada día hacen posible que, los alimentos, el vestido , el calzado, los medicamentos, los combustibles, etc., lleguen a las tiendas y a nuestros hogares, en definitiva, a los que hacen posible la prestación el servicio público de transporte de mercancías por carretera, que aun cuando, como todo es mejorable, es uno de los servicios más eficientes y eficaces de nuestro país.
Al inevitable y negativo impacto del COVID-19 en el transporte de mercancías en Galicia, (que exigió de éste un esfuerzo humano y económico extraordinario), hemos de sumarle el derivado de determinadas medidas adoptadas de forma cuando menos precipitada por el Gobierno, ( como las que motivaron el cierre de las centrales de Meirama y As Pontes, el de la industria del aluminio (A Coruña, y San Ciprián) y puede que la de ENCE (Pontevedra) y ahora, el del parón de la industria del automóvil, la disculpa es, la falta de suministro de microchips……
Como consecuencia, de este parón, los cientos de camiones que aprovisionan diariamente no solo al Groupe PSA en Vigo (Citroën-Peugeot), sino a toda su industria auxiliar, así como a los portavehículos que transportan los coches fabricados en esta planta, se han visto afectados por la decisión del Grupo Stellantis de reducir su producción, decisión en la que obviamente los transportistas no han participado, más aún ni siquiera han sido advertidos con un mínimo de antelación de esta posibilidad, para que tratasen de minorar el impacto de esta decisión.
Por ello, nos preguntamos ¿Qué pueden hacer estos cientos de transportistas con sus conductores?, ¿hasta cuándo van a estar sin actividad?, ¿cómo van a pagar las nóminas y las “letras”de sus camiones?, ninguna autoridad ha pensado en ellos.
Los empresarios del transporte nos preguntamos, ¿hasta cuándo debemos seguir tolerando este tipo de situaciones, estos abusos?